Se trata de un edificio de una nave, de planta rectangular. El interior está dividido en tres tramos mediante dos arcos apuntados que descansan en pilastras de piedra que se desarrollan en contrafuertes hacia el exterior de las fachadas.
Según la cartografía, en 1745 ya existía esta ermita en su ubicación actual. El antiguo calvario fue destruido durante la guerra civil. En 1945 fue restaurada y el culto en la ermita se reinicia. El calvario actual es de 1993.
Hasta bien entrado el s. XX, los marineros mantuvieron encendida una lámpara de aceite en la fachada, que servía como guía a las embarcaciones que buscaban fondeadero. De ahí el olivo que puede contemplarse junto a la fachada principal, fuente de aceite combustible.
Esta ermita abre sus puertas el 6 de agosto para celebrar el día de San Salvador.Tradicionalmente los vecinos de la calle la Ermita han sido los encargados de su mantenimiento, custodiando ellos mismos las llaves del oratorio.
El interior está dividido en tres tramos mediante arcos apuntado que descansan en pilastras de piedra y sustentan contrafuertes en el exterior de la fachada que te transportarán a las maravillas de ésta época.