Construcción rural del siglo XVIII a la que los calpinos acudían a proveerse de agua para uso doméstico, servía también de abrevadero, hasta que en 1878 se realizó la conducción a Calpe desde el Pou Roig.
Se ha incorporado a la construcción un pequeño monolito de piedra tallada, perteneciente al pozo, para depositar cántaros y recipientes en los que verter el agua, así como una pequeña fuente.